Texto y fotos por
©José Manuel Beltrán.
Las aguas del
aledaño río Yamuna, así como los estanques que preceden al edificio, reflejan
la silueta del impoluto mármol blanco del Taj Mahal recreando la fantasía del
paraíso.
Cuando uno viaja a la India, máxime si es su primera vez, una de las imágenes que ya lleva grabada en la retina es la considerada una de las 7 Maravillas del Mundo, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. La silueta del monumento “hecho por amor” se divisa desde buena parte de la ciudad; su visión más cercana, con el cambio de luz a lo largo del día, te causa emociones más allá de la majestuosidad del entorno.